La Deep Web, es la cara oculta y más perversa de toda la internet; dentro no se encontrarán páginas convencionales, si no páginas con contenido muy perturbador. Todo esto es así gracias a que en esta sección de Internet todo es anónimo, y aunque no es recomendable entrar allí, muchos usuarios se aventuran.
Es normal que esta parte oscura de la Internet, sea conocida de la forma más terrorífica o dramática, ya que muchas personas han pasado sustos en ella.
Curiosidades sobre la Dark Web (Deep Web)
Conoce la principales curiosidades sobre la Dark Web y la Deep Web.
A continuación se contará la experiencia real de un joven que se dedicó a acceder a esta cara de la red, y la experiencia no terminó nada bien, ni para él ni para su familia. Al final, la conclusión es lógica: no se debe entrar en la Deep Web.
Descubrí una página aterradora
Esta historia tiene como protagonista a un joven internauta llamado Fernando. Lo curioso es que este joven aún vivía con sus padres en el momento en que esto ocurrió, por lo que al final se podrá ver lo serio que puede llegar a ser el que cualquier persona inexperta se intente adentrar en la Deep Web simplemente por diversión.
Fernando llevaba ya algún tiempo navegando a través de la Deep Web, sin embargo, en esta ocasión todo se tornó muy aterrador. Cierto día, luego de pasar bastante rato en la red, se topó con una página de experimentos humanos bastante perturbadora. En ella se podían encontrar experimentos de diferentes índoles, pero todos con un mismo objetivo.
Al entrar a la web y navegar durante un rato en ella Fernando se pudo dar cuenta de que había un texto en color rojo sangre y una tipografía espeluznante que decía “Los experimentos llevados a cabo en esta página, son para probar que no todos los humanos son iguales”.
Nuestro joven internauta no pudo más que notar que la mayoría de los sujetos de prueba de esta web eran en su mayoría personas sin hogar, callejeras. Sin embargo, también pudo ver que había personas que lamentablemente pudieron haber sido secuestradas. Pero lo peor, es que había personas de todas las edades, incluyendo bebés y niños.
Todos estos experimentos eran sumamente inhumanos, e iban desde cortar extremidades, reacción al dolor extremo, exposición a radiación, e incluso la resistencia de los niños a actividades como estas. Mientras más investigaba, más se pudo dar cuenta de las cosas tan atroces que ocurrían allí. Sin embargo, la parte más macabra de experiencia real fue lo que ocurrió al llegar al final de la web.
“Veo que te llamas Fernando”
Al llegar al final de la web, se abrió una pequeña ventana de chat, y en la misma apareció un mensaje que decía “¿Disfrutaste del sitio?”. Aunque al principio no entendió de qué se trataba, Fernando después se percató de que era una ventana de chat, así que escribió “¿Quién es?”.
El extraño evadió la pregunta y preguntó “¿Cuál fue tu parte favorita?”, a lo que nuestro navegante repitió su pregunta, y el extraño se identificó como el dueño del sitio. Ante esto, Fernando no pudo hacer más que insultar a esta persona y decirle que era un enfermo; pero eso fue un grave error.
Hubo uno pausa breve, y este desconocido dijo “Umm, veo que te llamas Fernando”, y dijo la ciudad en la que vivía. Aunque el extraño estaba en lo correcto, Fernando lo negó. Sin embargo, luego de esto el extraño escribió algo que aterró muchísimo a Fernando: su dirección física. Esa persona sabía exactamente en dónde vivía Fernando.
Me mudo y nunca vuelvo a entrar a la Deep Web
Luego de haber escrito la dirección de nuestro intrépido internauta, este desconocido simplemente escribió “Que tengas buen día, Fernando”. Al leer esto, el joven cerró la web y a la vez su laptop e inmediatamente llamó a la policía, incluso antes de decirles a sus padres. Cuando estos llegaron les explicó la experiencia real de todo lo que vivió.
Los oficiales quisieron ver la computadora de Fernando inmediatamente, sin embargo eso no serviría de nada. La razón es que Tor no guarda historiales, y Fernando estaba tan impactado que no recordaba el link de la página, por lo que no sería posible cerrar el sitio web. Ante eso, los oficiales le recomendaron a aquella familia que se mudaran de allí tan rápido como pudieran.
Fernando cuenta que sus padres lograron vender la casa sumamente rápido, y en unas pocas semanas ya estaban muy lejos de allí. Aunque no se sabía si realmente su vida corría peligro, los padres de este joven no quisieron arriesgarse, y con mucha razón. Luego de esta experiencia tan traumática, Fernando nunca más trató de ingresar a la Deep Web.
Además, pasó mucho tiempo disculpándose con sus padres por haberlos hecho pasar por aquella experiencia real. Aunque afortunadamente los padres de Fernando llevaban tiempo queriendo mudarse. Sin embargo, se puede ver que la Deep web no es un lugar para cualquier tipo de personas, es un sitio muy peligroso.