¿Quién saldrá victorioso en la guerra por la Inteligencia Artificial entre China y Estados Unidos?
¿Conseguirá EE.UU. intimidar a China como lo hizo sobre la Unión Soviética? O China logrará lo que deseó muchas veces a lo largo de su historia.
La guerra comercial entre las dos potencias económicas del mundo, EE.UU. y China crece, para convertirla en guerra también tecnológica.
Esta tecnología de avanzada definirá a las sociedades del mañana. No es una rivalidad simbólica por el primer lugar, sino por el efecto geopolítico. ¿Quién está más cerca de llegar a su propósito?.
Algo de lo que podemos estar seguros acerca de la Inteligencia Artificial (IA), porque se nos dice tan a menudo y con un tono cada vez más alto, es que sea lo que sea, el interés nacional exige más, o China vencerá en esta carrera. La competencia está en marcha, y si U.S.A. no se inicia en tomárselo en serio, se encontrarán siendo los perdedores en una sociedad ficticia, ya que se creará una brecha cada vez mayor.
La utilización por parte de los militares en la Inteligencia Artificial, han generado inquietudes sobre el trabajo con investigadores chinos. Pero algunos expertos norteamericanos también sienten el deber de examinar el papel potencial a IA en los abusos de los derechos humanos, en una sociedad menos independiente que la suya.
Una carrera que Estados Unidos podría perder.
La falta de variedad política en China, hace que una vez que el gobierno se da cuenta de la trascendencia de algo, pueden entrar de lleno. No hay polémicas, no se permiten disidentes (por ejemplo la privacidad no es un problema en ese país y el uso del reconocimiento facial en el espacio público no tiene oposición). Esto significa que todas sus energías están en perfeccionar la tecnología más novedosa y no en preocupaciones por lo que pueda opinar un Congreso.
Las pretensiones de China son que en el 2025 se puedan lograr claros avances, para dominar este segmento en el 2030. De esta forma el país podría llevar la delantera absoluta en IA y ganar la guerra tecnológica.
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